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Gazmoñería Fiscal y Desastres

Por Francisco Montfort Guillén

Que las crisis y las contradicciones de su funcionamiento provocarían su ruina inminente. Esta fue la profecía… incumplida. Tenemos, en cambio, su renovación permanente. Ahora las crisis son constantes. Las contradicciones entre las necesidades a satisfacer, los satisfactores y los medios y mecanismos para obtenerlos continúan pero son atenuados mediante diversos mecanismos. La riqueza mundial ha crecido enormidades, los mercados se han expandido consistentemente y,  a pesar de sus éxitos, el capitalismo continúa provocando millones de personas excluidas de los beneficios producidos.

Para sobrevivir en el mundo capitalista, el único que existe, son necesarios un fuerte pragmatismo junto con nobles ideales; un gran conocimiento, tanto acumulado como innovador, principalmente tecnocientífico, económico y gerencial junto con experiencias políticas y de liderazgo. También es necesario contar con habilidades inasibles pero reales que se describen como: tener olfato, sentido común, sabiduría popular.

Por éstas y otras exigencias impuestas por el llamado sistema capitalista es que hoy, más que nunca, las sociedades requieren ser dirigidas por gobiernos fincados en el razonamiento y el diálogo públicos, la rotación de élites y de grupos, generalmente partidos políticos,  en el ejercicio del poder, mediante elecciones honradas, honestas y confiables; gobiernos conformados por hombres y mujeres competentes, de altas capacidades intelectuales, de sólidas habilidades técnicas y de inquebrantables conductas éticas y profesionales.

La ausencia de gobiernos con estas características, o la presencia de gobiernos con fallas graves en estos componentes, resultan disfuncionales al desarrollo capitalista. Un ejemplo paradigmático ha sido el gobierno de George Bush, Jr. Sus incapacidades generaron ambiciosas e inútiles guerras, abrieron el paso a una mayor escala de terrorismo y provocaron el abismo del desfondamiento casi imparable de la crisis financiera, iniciada el 15 de septiembre de 2008 con la quiebra del banco financiero Lehman Brothers.

En México nunca hemos tenido gobiernos y gobernantes que reúnan las características antes descritas y que serían la base de un Estado competente y poderoso, capaz de recrear y conducir una sociedad rica y de bienestar colectivo. Por razones y desmesuras explicables, aún ahora carecemos de gobiernos con la legitimidad, la buena fama y la capacidad suficientes para obligar a todos los causantes fiscales a pagar sus contribuciones legales para crear el tesoro público.

El equilibrio entre gobierno y contribuyentes mexicanos se finca en la gazmoñería: ambos viven profundamente afectados por devociones, escrúpulos y virtudes que no tienen. Sin fuerza ética, los actores de esta relación no se pueden exigir responsabilidades y optan mejor por engañarse mutuamente y autoengañarse. El tesoro público es insuficiente, no sólo para generar riqueza abundante; ni siquiera existen los fondos necesarios para que el gobierno ofrezca bienes y servicios de primera calidad y a precios competitivos. Puede gastar mucho (con Echeverría o López Portillo) o poco (con Zedillo y Calderón), pero el Estado nunca se atreverá a cobrar los impuestos que hacen falta para todo y para todos.

El país tiene una base gravable pequeña. Las leyes fiscales fueron diseñadas sobre la idea del privilegio, por eso cuentan con innumerables excepciones, incluyendo el impuesto general del IVA: “El 34.7 por ciento del gasto que realiza el 10% de la población con más ingresos se encuentra excento de pago de IVA o tiene tasa cero… (como también) el consumo en periódicos y libros, registran un nivel muy elevado entre las clases de más altos ingresos. Lo mismo sucede con colegiaturas de escuelas privadas y servicios de salud… La enorme evasión de impuestos ha sido calculada cercana al 50 por ciento de la recaudación potencial… El no cumplimiento del pago del IVA representó el 25.26 por ciento de la captación potencial de este impuesto en 2004… Evasión y exención provocan baja recaudación del IVA en México, alrededor de 3.7% del PIB en 2007 frente a 6.5 como promedio de la OCDE… Baja capacidad recaudatoria (9.4% del PIB en 2008, Brasil 35.5%), muchos compromisos de gasto que no pueden ser solventados, y con finanzas estatales débiles: el impuesto predial en Veracruz, como porcentaje del PIB estatal, fue 0.09 en 2003 y 0.11 en 2007. (Carlos E. Mayer Serra. Nuestro Inefectivo Pacto Tributario). El SAT esconde el nombre de personas físicas y de personas morales beneficiadas con la cancelación de créditos fiscales por un monto total de 74 mil millones de pesos. El IMSS sufre también por evasiones de cuotas que merman sus finanzas. Gazmoñería de los firmantes del pacto tributario que se convierten en desgarramiento de vestiduras cuando aparecen las tragedias naturales o sociales. Las crisis y desastres en una sociedad destruyen riquezas y vidas. Pero tienen también un efecto regenerador cuando existe un gran tesoro público y éste es manejado con honestidad, competencia profesional y responsabilidad política en inversiones públicas que ayuden a reponer las riquezas destruidas. Después de la temporada de lluvias, las aguas volverán a sus causes, aumentarán la pobreza y la descomposición social. “Karl” (que no Marx) y otros “sistemas” (que no capitalistas) meteorológicos desnudarán las ruinas de un gobierno, en sus tres niveles, ahogado en su propia incompetencia, sin dinero y sin nuevas ideas: el capitalismo subdesarrollado que no puede reinventarse y avanzar un plano superior.

















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